Leodanis Pérez |
Desde que se dio a conocer que el muchacho sería uno de los cerradores del equipo, muchos son los aficionados que indagan por él.
“Tiene fibra” fueron las palabras de Roberto Ramos cuando le pedimos el criterio. Y al parecer, la sapiencia del experimentado coach de pitcheo se ha encargado de confirmarla el joven lanzador en cada salida.
“Me gusta lanzar en la función que me asignen” me había dicho, mientras observaba una sesión en la pretemporada.
¿Qué tan duro puede resultarle a un novato ser cerrador en un equipo ganador en la pelota cubana?- le pregunté al director Ruperto Zamora.
“Le hemos dado confianza; en los juegos de preparación se ha visto bien y debe ayudarnos. Creo que será una de las buenas adquisiciones para el pitcheo de Los Gallos; en esta temporada y en el futuro” fue la respuesta.
El debut de Leodanis se produjo el 1º de diciembre, frente al campeón Pinar del Río y ante las cámaras de la Televisión Cubana. Si bien el partido estaba decidido (9x2) cuando lanzó en el noveno episodio, se le vio con movimientos limpios sobre el box y dueño de envíos en rompimientos entre 70-74 millas, que tira a tres cuartos, y una bola rápida que le llega hasta las 92 millas, y lo más importante, con buen control.
“El equipo confía en él; tanto es así que varios atletas se me acercaron y me propusieron que en el primer juego de la temporada le diera la pelota”
¿Por qué no lo hiciste?
“Ese juego estaba empatado a tres carreras en el noveno y trajimos a Dani González, que siempre le lanza bien a los pinareños. No quisimos apurarlo; nos pareció más sensato que debutara con menos presión. Tiene las condiciones para imponerse” ratificó Zamora.
Y al parecer Leodanis quiere ratificar las opiniones.
Así lo demostró el 7 de diciembre ante Las Tunas. Entró con bases llenas, en la octava entrada en el estadio Julio A. Mella, donde los locales perdían 4x2. Con la madurez de quién tiene años en el pitcheo actuó: ponche a Dannier Rodríguez y acto seguido dominó al experimentado Yordanis Scull en roletazo por el campo corto.
El ansiado primer salvamento lo gestó en el noveno, al sacar a los emergentes Michel Brito (torpedero a primera) y Yudier Rondón (ponche) y también al peligroso segundo bate Andrés Quiala, que forzó en la intermedia al hombre proa Jorge Jhonson, embasado por boleto.
De seguro, la jornada de este 7 de diciembre será recordada por siempre por el lanzador del municipio Taguasco, quién se destaca desde las categorías inferiores.
Recordemos que en el campeonato nacional de 15-16 años, del 2009, lanzó para efectividad de 1.92 con balance de 5-4 y los contrarios le batearon para solo 199.
A su paso por los juveniles siguió brillando. Baste señalar que en los torneo nacionales del 2010 y 2011 acumuló 103.0 entradas, con balance negativo (5-6), pero con un excelente promedio de carreras limpias (2.09) y ofensiva rival de apenas 202.
En la Liga de Desarrollo de este año, salvó tres encuentros, ganó cuatro y perdió uno, en diez oportunidades, con efectividad de ensueño (1.57).
Enhorabuena la llegada de quien se presume sea el novato salvador.
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