Futbolista espirituano hace historia en Estados Unidos

Ariel Martínez (11) hizo un triplete histórico

En la Copa de Oro ha bebido con ganas el goleador Ariel Martínez. El mejor jugador de todos los tiempos en Sancti Spíritus es sin dudas el gran referente dentro de Cuba en el principal evento de la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe (CONCACAF), que se efectúa en Estados Unidos. 

Arielito marcó un histórico hat-trick ante Belice, con el cuál propició que su equipo llegara a cuartos de final. La presencia en esa fase iguala el desempeño del 2003, cuando también se clasificó entre los mejores ocho de un torneo, en el que Cuba suma siete participaciones.

El triplete del yayabero (37, 62,83), más la diana de Yenier Márquez (´92), no solo dieron el pasaje hasta el estadio Georgia Dome de Atlanta, sino que significó el segundo triunfo de los antillanos en 19 partidos en Copas de Oro.

Antes del sonado triunfo sobre los beliceños, la selección que dirige Walter Benítez había perdido (0x3) y (1x4) frente a Costa Rica y Estados Unidos, respectivamente, por lo que solo un milagro colectivo o la genialidad de un atleta podrían vaticinar la presencia en la siguiente ronda como uno de los dos mejores terceros lugares.

La exhibición más reciente sobre el césped del estadio Rentschesler Field, de East Hartford, Connecticut,  confirma el gran momento que vive el espirituano, quién el año pasado resultó protagonista en la obtención por vez primera de la Copa del Caribe, en la que anotó tres goles, dos de los cuáles fueron determinantes contra Guyana Francesa.

Este año, el mediocampista -nació el 9 de mayo de 1986- residente en la popular barriada de Jesús María en la capital provincial, fue héroe dentro del equipo Villa Clara, con el se proclamó campeón nacional, al actuar de refuerzo.

Superada la primera etapa, ahora las aspiraciones de Ariel Martínez y del resto de sus compañeros será seguir bebiendo en la Copa de Oro. Para ello tienen un solo camino: vencer el sábado a Panamá.

Para el yayabero, el desafío tendrá un sabor a revancha histórica, toda vez que la primera ocasión que jugó en Copas de Oro fue el 10 de junio del 2007, cuando estuvo frente a su próximo rival los cinco minutos finales en el empate de Cuba (2-2).