Lourdes Yunielkis Gourriel |
Ese día, el menor del clan Gourriel, pegó su primer jit en series nacionales, que para mayor satisfacción personal y familiar, fue un jonrrón por el jardín izquierdo en el estadio Santiago Changa Mederos, ante el derecho Kuglay González, de Metropolitanos.
La conexión se produjo en la novena entrada, cuando salió a batear por Raikel Morales, con el juego 10x2 a favor de Los Gallos.
El muchacho, de 17 años, debutó el 10 de diciembre ante Pinar del Río, en la séptima entrada y en el José Antonio Huelga, donde conectó por el campo corto un rolling, que sirvió para doble play, frente a los envíos de Erlis Casanova. En el noveno episodio volvió a producir para una doble matanza, cuando roleteó al pitcher Jesús Guerra, con corredor en la inicial, en lo que significaron los dos últimos out del partido, ganado 7x1 por los visitantes.
La otra oportunidad ofensiva que tenía fue el domingo 12, frente al propio equipo y el novato de 27 años Reinier Verano, que lo dominó en rolata por tercera base.
El cuadrangular de Gourriel Castillo lo convierte en el segundo espirituano que su primer imparable en series nacionales se lleva las cercas.
El otro que lo hizo fue Yordanis Rodríguez, el 28 de diciembre del 2005, durante la serie XLV, después de fallar nueve turnos y en el noveno acto, en el Huelga, y nada menos que ante el estelar Pedro Luís Lazo.
Rodríguez milita con Los Gallos en la actual temporada, solo que su paso por categorías inferiores no ha tenido la brillantez del benjamín de los Gourriel, quién fue mundialista en las categorías 15-16 años y juvenil, en las que acumula plata y bronce, respectivamente, y que en el 2011 debe ser uno de los titulares de Cuba en el torneo panamericano “AAA”, reservado para menores de 18 años.
El clan Gourriel |
Lourdes Yunielkis Gourriel, que se estrenó internacionalmente en el 2005, cuando integró la selección nacional de 11-12, llegó al certamen máximo del béisbol cubano con average de .312, acumulado desde el último torneo en la categoría 13-14, hasta lo hecho en el nacional juvenil del 2010, en el que concluyó de líder en anotadas, total de bases y veces que impulsó el empate o la ventaja; además de resultar segundo en jonrrones y sencillos conectados, cuarto en slugging y quinto en impulsadas.
El “chico”, de 1.93 metros, es protagonista de otro hecho inédito en series nacionales: ser dirigido por el padre y jugar junto con todos sus hermanos, el jardinero central Yunieski y el antesalista Yulieski, para muchos el pelotero más completo de la actualidad en Cuba.
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