Cepeda desbanca a Ichiro Suzuki

El legenadrio Sadaharu Oh saludó a Cepeda en Japón

El espirituano Frederic Cepeda ha desbancado al mítico pelotero japonés Ichiro Suzuki en el liderazgo histórico en jits en los Clásicos Mundiales del beisbol.

El cuarto bate del equipo cubano acumula en estos momentos 27 sencillos, con los cuáles se sigue alejando de la marca del jugador de los Yanquis de New York, quién sumó 24 en las dos primeras ediciones de esta competencia.

Suzuki totalizó el primado en 16 juegos; mientras que en esa misma cantidad de presentaciones Cepeda totalizó 26.

Al comenzar el III Clásico, el designado de Cuba tenía 22 imparables repartidos en diez de la edición del 2006 y 12 en el 2009.

En la versión del 2013, el único bateador ambidextro de la selección nacional produjo con facilidad ante Brasil (4-2) y China (3-2); mientras que en la victoria sobre Japón pegó un doblete en tres oportunidades, para reafirmarse de dueño en este departamento y consolidarse como uno de los mejores bateadores en este evento, en el que promedia de por vida en estos momentos .450 en 60 turnos oficiales.

Llamativo en el desempeño ofensivo del jugador natural de Sancti Spíritus es que ha conectado en diferentes ubicaciones en la alineación, aunque de cuarto bate lo hace para un fabuloso
.615 (13-8; 6 CI).

Sin embargo, de tercero los números son de lujo (16-9; .563; 6 CI), al igual que en el quinto turno (19-8; .421; 5CI). La producción más discreta la ha tenido cuando lo colocaron de sexto hombre
(7-2; .286; 3 CI)

Otro dato que ilustra la maestría del subcampeón del Primer Clásico, es que de los 17 juegos en que ha participado, solo dejó de batear jit en uno solo: el del 18 de marzo del 2009, cuando la dupla de Hisashi Iwakuma- Toshiya Sugiuchi lo dejó en blanco en cuatro veces, durante el revé frente a Japón 5x0 en cuartos de final.

Cepeda también es el máximo impulsor de carreras (20) en la joven historia de esta competencia, en la que comparte la cima en jonrones (5) con el surcoreano Seung Yuop Lee, quién quedó sin opciones de seguir burlando cercas, ya que su equipo ahora no pasó de la ronda inicial.  

Todos esos números confirman que los Clásicos Mundiales parecen  diseñados para el espirituano. Esperemos que el talento excepcional que posee para batear lo siga exhibiendo en la segunda vuelta del torneo, en el que Cuba enfrentará en su próxima salida a Holanda en pos de llegar a la semifinal de San Francisco.