viernes, 29 de octubre de 2010

Cepeda está feliz

La jovial personalidad de siempre ahora se acrecienta.

A cada paso Cepeda es requerido por el pueblo y en sus respuestas muestra una satisfacción plena. Razones le sobran.

Y es que Rolando, aquel muchacho que a los quince años impresionaba en la EIDE Lino Salabarría, ahora es el primer espirituano que jugó en un campeonato mundial de voleibol, del que regresó con una sorprendente medalla de plata.

“Es lo mejor que me ha pasado en mi vida. Nunca pensé que a los 22 años sería subcampeón del mundo en un deporte de tanta calidad. Cierro los ojos y me parece que es un sueño” nos dice en su casa, en Cabaiguán.

¿Crees que pudiste jugar más?

“Sí, es posible; pero somos un equipo que tiene un director y él es quien decide cuando jugamos. En las oportunidades que me dieron di lo máximo. Mi mejor juego fue en octavos de final contra Bulgaria, fui regular y marqué quince puntos, pero en el tercer set me lesioné un tobillo y tuve que salir. Yo me preparé para jugar de auxiliar porque le hacía falta al equipo otro hombre que recibiera; pero en el mundial regresé a mi posición habitual de opuesto. Estoy contento porque ayudé al equipo, y ese es mi objetivo”

Cuba estuvo a gran altura, pero el juego por el oro ante Brasil, dejó un sinsabor, no por la derrota (0-3), sino por la forma en que jugaron.

“La juventud e inexperiencia nos pasó la cuenta, queríamos pero no podíamos. Solo Yoandri Díaz y el capitán Robertalndy Simón tenían experiencia del mundial pasado y no mucha porque apenas jugaron. Comenzamos los dos primeros set con muchos nervios, y eso se paga caro. Los brasileños no cometen errores y cuando te sacan cinco puntos de ventaja es muy difícil descontarlos. De todos modos estamos supercontentos porque el objetivo inicial de nosotros era estar entre los mejores ocho equipos del mundo. En la semifinal le ganamos a los serbios, que nos habían vencido en la Liga Mundial de este año y en la pasada y también en el mundial. La final fue muy tensa. A partir de ahora será diferente.”

¿Qué vaticinas para Los Juegos Olímpicos?

“Dentro de dos años tendremos una cantidad importante de partidos internacionales, seremos más experimentados, creo que debemos estar en medallas. De aquí para atrás estábamos del uno al cuatro. Tenemos que prepararnos, el 2011 es un año bueno, estarán los panamericanos, la copa del mundo, la liga mundial”

¿Cómo son las relaciones interpersonales del grupo, partiendo que todos son muy jóvenes?

“Somos familia, es como si estuviéramos en el barrio, hablamos, jaraneamos entre todos. Nos damos mucho ánimo antes de salir a jugar”

¿A que personas le agradeces ser una personalidad del voleibol mundial?

“Los profesores de la EIDE me ayudaron mucho, en especial Osiel Vázquez, que ahora presta colaboración en Dominicana y que siempre ha estado muy pendiente de mí. Tengo que hablar de los profesores del área de aquí, que me enseñaron los primeros fundamentos del voleibol. Y mi familia, que me sigue y aconseja, y que sin ellos no hubiera logrado estos resultados”.

¿Imaginaste que serías subcampeón mundial cuando estudiabas en la EIDE?

“Soñaba con estar en el equipo nacional y sabía que podía por mi talla y rendimiento, pero lo de un mundial es otra cosa, en especial la medalla de plata. No tengo palabras para hablar de eso. Ahora quiero seguir soñando y ser campeón olímpico. Ya soy subcampeón mundial juvenil y de la Copa del Mundo. Me esforzaré para ser medallista en todas las competencias”

¿En que posición debe estar el futuro tuyo dentro del equipo nacional?

“Me gustaría jugar opuesto, pero mi masa muscular no me lo permite. Al principio pensaba que podía jugar los doce partidos de la Liga Mundial, pero me he dado cuenta que no, los opuestos son jugadores altos y fuertes que tienen la mayor responsabilidad en el ataque, por eso se necesita mucha fuerza. Para ser auxiliar debo mejorar el recibo; en el mundial juvenil fui auxiliar. Con entrenamiento lo puedo mejorar”

En la despedida, Rolando Cepeda remató de manera exquisita.

“Al pueblo de Sancti Spíritus y en especial al de Cabaiguán, les pido que confíen en mí y en la generación actual de voleibolistas; no los haremos quedar mal”

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